Los bosques contienen diez veces más energía que la que se consume cada año a nivel mundial
La madera proporciona más energía que la generada por el sol, el agua o el viento. Gracias a ella 2.400 millones de personas pueden cocinar, hervir agua y calentar sus hogares, explica Naciones Unidas.
El 21 de marzo, se celebra el Día Internacional de los Bosques. Este año, la organización de las Naciones Unidas subraya cómo la dendroenergía (la energía que proviene de los árboles) contribuye de manera significativa a mejorar la vida de las personas, fomentar el desarrollo sostenible y mitigar el cambio climático.
La madera es una importante fuente de energía renovable. La madera proporciona más energía que la generada por el sol, el agua o el viento. En la actualidad, subrayan desde la ONU, la madera representa aproximadamente el 45% del suministro de energía renovable en el mundo (27% en África, 13% en América del Sur y el Caribe y 5% en Asia y Oceanía).
La madera desempeña un papel importante tanto en los países en desarrollo como en algunos industrializados. En torno a la mitad de la producción mundial de madera (unos 1860 millones de metros cúbicos) se utiliza como fuente de energía para cocinar, calentarse y generar electricidad. «Gracias a los combustibles provenientes de las masas boscosas (o dendrocombustibles), 2.400 millones de personas pueden cocinar, hervir agua y calentar sus hogares», concretan desde la organización.
La dendroenergía es un motor del desarrollo económico. Casi 900 millones de personas, sobre todo en los países en desarrollo, se dedican al sector de energía de origen forestal a tiempo completo o parcial. La modernización de este sector energético puede ayudar a revitalizar las economías rurales y estimular el desarrollo empresarial: un aumento de las inversiones en la producción de dendroenergía y dendrocombustibles avanzados puede proporcionar ingresos para financiar una mejor gestión forestal, más bosques en crecimiento y más puestos de trabajo.
Los árboles contribuyen a una mayor calidad de vida y al ahorro energético en las zonas urbanas, señala la ONU. La colocación estratégica de árboles en las zonas urbanas puede enfriar el aire entre 2 y 8º C.
Asimismo, la dendroenergía mitiga el cambio climático y fomenta el desarrollo sostenible. Los bosques del planeta contienen diez veces más energía que la que se consume anualmente a nivel mundial. La dendroenergía es, por tanto, un recurso renovable de enorme potencial para satisfacer la demanda energética del Globo. Las masas boscosas proporcionan, además, aire limpio, agua y energía renovable con efecto neto neutros en cuanto a las emisiones de dióxido de carbono. «La gestión sostenible de los bosques nos conduce a un futuro más ecológico», insisten desde la organización.
«Los bosques suponen una fuente de energía, ahora y en una futura economía verde mundial», continúan. Una mayor inversión en innovación tecnológica y en la gestión sostenible de los bosques es la clave para aumentar el papel de estos ecosistemas como fuente principal de energía renovable. «Si invertimos en nuestro futuro sostenible, en el cumplimiento de varios Objetivos de Desarrollo Sostenible y en el fomento de una economía verde. Un aumento de la superficie de arboledas sostenibles, familiares y comunitarias, y el uso de cocinas de leña no contaminantes y eficientes pueden facilitar el acceso de millones de personas más de los países en desarrollo a energía barata, fiable y renovable», concluyen en la nota, difundida hoy con motivo del Día Internacional de los Bosques.
Fuente Informativa: ABC / Natural
Fecha de publicación: 21/03/2017 10:33h - Actualizado: 21/03/2017 10:35h