Graduandos agradecieron a Dios por la meta alcanzada
“Debemos formarnos para ser felices y lo nuclear de la felicidad está en Dios”. Así exhortó el presbítero José Jesús Salcedo, párroco de la iglesia Nuestra Señora de Guadalupe, a que los nuevos ingenieros que egresan de la Universidad Nacional Experimental Politécnica “Antonio José de Sucre”, Vice-Rectorado Puerto Ordaz, continúen preparándose y ejerzan con orgullo su profesión.
La eucaristía fue el acto previo a la entrega de placas y reconocimientos por especialidades, tanto a estudiantes con mejores índices como a padrinos de la promoción designada “Bicentenario Batalla de San Félix”.
Fue en el auditorio “Osvaldo Silva” donde se reunieron los graduandos y sus invitados, para escuchar la misa dedicada al agradecimiento por la meta alcanzada.
"La gratitud debe ser lo primero a Dios", expresó el párroco
El sacerdote explicó que el ámbito vocacional es a lo que el Señor no llama para ser felices. “Él nos da la capacidad y hacer y aprender”, dijo.
Resaltó la importancia de retribuir primero a Dios y también a la familia por la oportunidad de compartir, por el mejoramiento profesional y por el título que obtendrán.
Graduandos compartieron con familiares en la eucaristía
Recibirán títulos cinco Magíster y 21 Especialistas; estos se suman a los nuevos ingenieros en Mecánica, Electrónica, Eléctrica, Industrial, Metalúrgica, además de un Técnico Superior Universitario. En total son 218 graduandos.
Prensa UNEXPO
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